
En la mañana de este 22 de mayo, fue publicado en la Gaceta Oficial de la República, el Decreto-Ley 98/24 "De la Estadística Oficial" y el Decreto 130/25, Reglamento del Decreto-Ley "De la Estadística Oficial". Amos documentos han sido fruto del esfuerzo de todos los trabajadores de nuestro sistema y de la colaboración de otros organismos.
Por primera vez, se dispone de un marco legal que desarrolla, en todos sus dominios y desde lo metodológico, organizacional y jurídico, cómo se deben producir las estadísticas oficiales en Cuba.
Este marco legal moderniza y garantiza la veracidad de la información que sustenta políticas públicas claves y establece el marco jurídico general para la elaboración, producción y difusión de las estadísticas oficiales de la República de Cuba, que satisfagan el derecho de todas las personas a solicitar y recibir del Estado información veraz, objetiva y oportuna.
Tiene alcance a los órganos, los organismos de la Administración Central del Estado, las entidades nacionales, órganos locales del Poder Popular y, en cada caso, sus órganos de dirección, entidades subordinadas y adscriptas; el sistema empresarial estatal, con independencia de la forma organizativa que adopte; las sociedades mercantiles de capital ciento por ciento cubano, mixto, totalmente extranjero, y sus sucursales; los actores económicos no estatales; las organizaciones políticas, sociales y de masas, así como sus entidades subordinadas o adscriptas; y a otros sujetos que se determinen por la ley.
El Decreto-Ley 98 “De la Estadística Oficial” establece que la Oficina Nacional de Estadística e Información es la entidad nacional encargada de dirigir y controlar la política estatal en materia de estadística oficial, y la dirección metodológica del Sistema de Información del Gobierno.
Las estadísticas oficiales son las que describen, de manera representativa, los fenómenos demográficos, sociales, económicos y ambientales del país y sustentan la rendición de cuenta a todos los niveles, las políticas y programas públicos que aseguran el desarrollo económico y social. Se producen dentro del Sistema Estadístico Nacional, integrado por la ONEI y los otros productores de estadísticas oficiales, en cumplimiento de los principios y las normas para la seguridad y protección de la información oficial.
El éxito depende de la colaboración. Instituciones, empresas y ciudadanos deben contribuir con información veraz, mientras que la ONEI, como rectora, garantiza la calidad y oportunidad de los datos.
El Decreto-Ley 98 de la Estadística Oficial es más que una norma: es el cimiento de un Sistema Estadístico Nacional más moderno y preparado para los retos del futuro y un paso hacia una Cuba más transparente.